Quienes me conocen habrán notado que en el último mes ha habido cierto tema que ha reflotado en mis conversaciones personales con bastante... Insistencia? Vale, quizás me he pasado un poco, algunos de mis amigos hasta me han bautizado como "Testigo de NaNoWriMo"... Oh, perdona, que no sabes qué es? Déjame que te lo cuente, solo una vez más y no vuelvo a repetir esta palabra hasta dentro de un año.
NaNoWriMo significa National November Writing Month (algo así como el mes de noviembre es el mes nacional de la escritura). Bien, de esta idea ha nacido un fenómeno internacional que consiste en escribir como locos durante un mes hasta completar una novel de (mínimo) 50.000 palabras. Al principio asusta un poco, pero en realidad cincuenta mil palabras repartidas en treinta días son una página y media por día (no es un exceso para quien le gusta escribir). El problema real está en que no puedes saltarte un solo día. Tienes que ser perseverante y constante, a menos que quieras dejarte los dedos tecleando una cantidad insana de palabras de golpe.
Como habréis intuido, yo he sido una de estas locas que se ha pasado noches en vela para terminar mi queridísima novela y que, por cierto, lo ha conseguido! Os recordáis lo qué decía de la perseverancia? Bueno, en esto he fallado un poquito (a parte del NaNo y del blog y de la carrera y de cursos y de trabajo... tengo una vida), pero decidí no rendirme y darlo todo en días puntuales. Por lo tanto, si veis mi gráfico del NaNo se asemeja más a una escalera, y no a una rampa, que sería lo ideal. En fin, ¿a quién le importa esto?
Quería hacer esta entrada para deciros que vosotros, sí, los que me estáis leyendo, también podéis ser NaNoWriMers el próximo noviembre. Si no sabéis muy bien porqué deberíais dejaros tantas horas en el reto, aquí os doy unas cuantas razones para animaros.
El primer factor que mola del NaNoRriMo es que, aunque al principio te lo parezca, no escribes solo. Tanto en los fórums, como en Twitter y, sobretodo, en Facebook, se crea una comunidad maravillosa que te anima constantemente a seguir adelante, a escribir y escribir y a no parar... Nos damos consejos, compartimos dudas... hasta pedimos consejo para los nombres de los personajes! Imagínate: estás escribiendo durante horas, no puedes más y entras en el grupo, donde alguien ha colgado un chiste sobre gatos, escritores y café. Te saca una sonrisa y te obligas a decirte a ti mismo "venga, un poquito más".
Además, durante este NaNoWriMo se crearon uno de los inventos más insanos en la comunidad española: las noches "peligrosas" de escritura. Estas noches consistían básicamente en aguantarnos los ojos con palillos para no dormirnos... Una tortura a primera vista, pero que divertido y productivo ha sido!
Vamos a hablar francamente. Hacemos el Nanowrimo para escribir, sacarnos esta historia que nos ha estado rondando en la cabeza durante tanto tiempo. Es hora de aprovechar para ponerse las pilas y cumplir tu sueño de plasmar de una vez por todas tu historia. Por lo tanto, con este reto consigues tener material en el que trabajar, que ha salido de ti mismo, algo para empezar a modelar tu historia durante los meses siguientes. Y la parte de creación desde cero suele ser la más divertida: es donde las palabras te brollan solas y te sientes orgulloso de como ha salido tal escena. Esto nadie te lo quita (aunque dos semanas después te horrorices al volver a leerlo).
Por lo tanto, es hora de ponerte a escritura, de aprovechar al máximo tu afición y desconectar del mundo. Por el simple hecho de disfrutar de algo que te gusta, ya deberías apuntarte. Luego en la revisión ya verás todos los errores y sufrirás, pero al menos tendrás algo que corregir, lo pillas?
Y por último, creo que el NaNoWriMo es una excusa perfecta para subirte el ánimo, decirte a ti mismo "pensaba que no lo conseguiría, pero aquí está". Ponerte unos objetivos y superarlos, aquí está la cuestión. La sensación que tienes al darte cuenta de que has terminado tu primer libro... Indescriptible.
(Aunque supongo que la de publicarla es mil veces mejor).
El reto te obliga a re-engancharte a la escritura y por ende, a volver a amarla y a encontrarte íntimamente otra vez con ella (paro que me está quedando muy místico). Además, te das cuenta de todo el tiempo que llegamos a perder durante el día. En mi caso, aprovechaba los viajes en tren, los tiempos muertos entre clases, mientras esperaba a amigos... Cualquier momento era bueno para escribir. Y de todos estos momentos he acabado reuniendo miles de palabrejas. Durante este mes, me he planteado muchas veces que podríamos llegar a hacer si aprovecháramos más el tiempo... Os imagináis los resultados?
Antes de cerrar el tema, me gustaría recordar que si realmente te gusta la escritura no tiene que ser una moda de un mes, sino que es un trabajo diario que se lleva a cabo durante TODO el año. El Nanowrimo es solo una excusa para enamorarte de ella, un empujón. Pero si realmente es tu vocación, mátate a escribir! Y, ya que estamos, corrige tu historia, vuelve a escribirla, sufre, hasta que estés un poco orgulloso de lo que tengas entre manos.
En resumen, que os gusta escribir a lo bestia, tenéis que apuntaros sí o sí al próximo NaNo, seguro que no os vais a arrepentir... Y no me vengáis con excusas, que aquí no valen. Tendréis la oportunidad de conocer a un montón de gente con vuestra misma afición, conseguir la motivación para escribir esta historia que os ronda desde hace tiempo por la cabeza y una excusa para tomar mucho, mucho café.
¿Nos vemos el siguiente noviembre?